El sábado por la mañana, fui a un taller de arte
Contemporáneo de Naroa Armendáriz que
había en el Centro Huarte.
Había que pintar al ritmo de las diferentes músicas
que ponía un DJ.
Depende del tipo de música algunas veces me resultaba
más difícil dibujar que otras. Cuando la música era más lenta, dibujaba
paisajes y cosas relacionadas con la naturaleza. Cuando cambiaba la música y
era más rápida era cuando me resultaba más difícil porque no sabía bien que dibujar,
me salían dibujos abstractos.
El tiempo se me pasó muy rápido porque estuve muy
entretenido.
Cuando ya había unos cuantos dibujos, Naroa empezó a
juntarlos y a elegir partes de cada uno, con los que iba montando una nueva pintura.
No le dio tiempo a terminar porque había muchos
dibujos para mezclar.
A mi me pareció que el dibujo final se parecía a un
cielo gris con un foco de luz que parecía un rayo. Era un dibujo muy raro, típico
de arte contemporáneo, osea, que a simple vista no se entiende nada (o por lo
menos yo).
